La publicidad es una profesión nueva, pero ese no quiere decir que sea nueva en su uso. La historia de la publicidad se remonta hasta la época de los antiguos egipcios, de quienes se han encontrado documentos que señalan que esta cultura ya utilizaba alguna forma de publicidad incipiente.
A lo largo de los años la publicidad ha ido evolucionando. Fueron apareciendo los primeros antecedentes de lo que hoy llamamos paneles, gigantografías, carteles, flyers, etc. Aparecieron también los pregoneros, quienes anunciaban sucesos o noticias a viva voz.
El despegue de la publicidad no sucedió hasta la invención de la imprenta. Es en ese momento en el que la publicidad logra hacerse masiva. Es entonces cuando se inicia la etapa moderna de la publicidad, pues la aparición de la imprenta fue potenciada por el desarrollo de las ciudades.
La publicidad alcanzó niveles elevados, tanto así que el periódico The Spectator incluye en sus páginas publicidad, pues esto les ayudaría a solventar los gastos de impresión. Entonces surge lo que se conoce como “tarifa publicitaria” de los medios de comunicación. A partir de la incursión de la publicidad en los medios masivos de comunicación, se comienza a especializar para posteriormente convertirse en una profesión, entonces surgen las agencias de publicidad. En 1845 nace en Francia la primera agencia de publicidad, "Societé Géneérale des Annonces", destinada a prestar servicios a los anunciantes y a mediar entre estos y los medios de comunicación.
Durante el siglo XX la publicidad se vuelve más especializada. En los primeros años de 1900 la publicidad solo se dedicaba a mantener a la marca dentro de la mente del consumidor. Luego se pasaría a la elaboración de argumentos para estimular la compra de un producto. Estos argumentos eran racionales. Es esta etapa del desarrollo de la publicidad aparece la radio y esto transformaría la forma de anunciar, que hasta entonces había sido solo por medios impresos.
Hacia 1950, los mensajes publicitarios de centraron en la propagación de la marca y algunos rasgos diferenciales, que luego serían el eje de las estrategias de imagen que luego se pondrían de moda. Durante estos años aparece una concepto trascendental para la industria publicitaria, se trata del UPS (Unique selling proposition o Propuesta única de ventas). La propuesta única de ventas se centraba diferenciar un producto con respecto a su competencia.
Jhon Walter Thomson desarrolla la publicidad testimonial. Esta forma de hacer publicidad se caracteriza por la venta de un producto destacando sus beneficios y asociándolo a un personaje que tenga rasgos de su personalidad que se asemejen a las de la marca. La estrategia consiste en acentuar el prestigio de un producto al de una personalidad a la que se le otorga reconocida autoridad en determinados aspectos, ya sea un artista, un científico o un deportista.
Con Ogilvy, la publicidad se centra en la creación de mensajes a partir de propuestas creativas, este cambio sustancial, permitiría diferenciar a los productos mediante cualidades explícitamente subjetivas. Se cambia el enfoque tradicional de la publicidad tal como se utilizaba en la década anterior, ya que dejaba de ser articulada racionalmente para apelar a mensajes divertidos o sorprendentes. Entonces se utilizó el humor como herramienta para persuadir y llamar la atención de los potenciales consumidores, uno de los máximos exponentes de la publicidad humorística fue Bill Bernbach.
Muchas crisis golpearon a la sociedad norteamericana tales como: Vietnam, el caso Watergate, etc. La sociedad no se ocupaba de la publicidad, entonces el recurso humorístico perdió valor y efectividad.
Se tenía que buscar la forma de llegar al público efectivamente, entonces surgió el recurso de la segmentación. Los mensajes publicitarios fueron planteados para distintos tipos de públicos, al igual que los productos, los cuales se especializaron en satisfacer distintas demandas a pesar de pertenecer al mismo rubro.
La publicidad en estos tiempos sufre la arremetida de una dran enemigo : en control remoto. La gente no mira la publicidad que sale en la tv. En los cortes comerciales, cambia de canal. Entonces la publicidad ha optado por el pratocinato y el auspicio de diferentes programas televisivos, con lo cual se asegura que el televidente tenga que ver la marca dentro del mismo programa sin necesidad de esperar el corte comercial.
Pero además ha aparecido otro soporte importante: internet. Este nuevo soporte trae nuevos retos para la publicidad, pero también nuevas opciones de expandir el aspecto creativo.